Saber estar solos
Si queremos tener relaciones verdaderas y auténticas ya sean
de amor, de amistad, familiares… primero debemos saber estar solos, debemos ser seres independientes para que
nuestras relaciones no se vean enturbiadas por sentimientos de necesidad o de
infelicidad o de dependencia.
Saber estar solos es poder disfrutar de nosotros mismos, de
nuestras posibilidades, de nuestro cuerpo de nuestro hobbys. No debemos tener
miedo a la soledad ya que se puede utilizar para encontrarnos a nosotros
mismos, para conocernos mejor, para proyectar nuevas metas y meditar sobre lo
que somos y lo que queremos. Tener momentos o temporadas de soledad pueden ser
muy buenos para crecer personalmente.
De esta manera nos relacionaremos con los demás de una
manera enriquecedora, no lo haremos como seres dependientes, no tendremos
pareja o amigos por necesidad sino porque esas personas serán especiales para
nosotros y nuestros sentimientos serán auténticos.
Esto nos ayudará no solo a
tener relaciones verdaderas y positivas sino también a relacionarnos con las
personas que realmente nos gustan y nos pueden ayudar a ser felices y no nos
uniremos a personas que no nos convienen solo por el hecho de no estar solos.
También seremos personas más atractivas hacia los demás, ya
que cuando una persona va por la vida
desde la independencia y la seguridad personal, tiene mucho más que ofrecer que los que se relacionan haciéndose
dependientes.
El ser independientes nos hace ser más auténticos, más fieles a
nosotros mismos y por lo tanto tenemos más que ofrecer a los demás ya que nos expresaremos
y moveremos como los seres únicos que somos y sin intentar imitar a nadie o
hacer lo que pensamos que los demás quieren ver u oir.
Si buscamos una pareja porque no sabemos estar solos,
entonces lo más problable es que acabemos con una persona que no nos hace
felices, y si tenemos la suerte de haber dado con esa persona merecedora de
nuestro amor, es muy posible que acabe huyendo ya que le agobiaremos con
nuestra dependencia y acabará por ver en nosotros a seres débiles y poco
atractivos. Nos convertiremos en parásitos emocionales, seres que se pegan a
otras personas por debilidad y que basan su existencia en la dependencia, seres
que se van haciendo más débiles y que acaban exprimiendo a la persona que
tienen a su lado.
Es bueno tener y reservarnos momentos, o temporadas de
soledad para hacer cosas que no se pueden hacer cuando estamos en compañía, o
que son más difíciles de hacer en compañía. Debemos aprovechar los tiempos de
soledad para cuidar nuestro cuerpo, cuidar nuestra mente, meditar, descubrirnos
a nosotros mismos, proyectar nuevas metas, pensar en lo que queremos y lo que
no, conocernos mejor a nosotros mismos.
Cuidar nuestro cuerpo
Cuidar
nuestra salud (cuidar de nuestro cuerpo como si cuidáramos de un niño pequeño,
alimentarle bien, de forma saludable, disfrutando de cada pequeña cosa que nos
podemos permitir, como una comida sana, un buen paseo, ejercicios físicos o de
relajación, mejoras en nuestro físico…) todo que además de darnos placer nos
haga sentirnos mejor y nos haga estar más sanos.
Cuidar y cultivar nuestra mente.
Tan importante como cuidar nuestro cuerpo es
cuidad nuestra mente. Hacer ejercicios mentales de cualquier tipo nos ayuda a
tener nuestra mente en forma. Aprender cosas nuevas, cambiar costumbres,
disfrutar leyendo un buen libro, escuchar música…
Planear nuevos proyectos, tener nuevas metas e ilusiones.
Es importante tener siempre ilusión por algo nuevo, planear
un pequeño o gran viaje, leer libros que nos hagan aprender algo nuevo,
apuntarnos a algún curso que nos guste, conocer gente nueva, no debemos
dejarnos llevar por la apatía y las costumbres. Las metas nuevas, aunque sean
para hacer realidad pequeños deseos siempre nos hacen mantenernos con ilusión.
No te autocastigues, ¿por
qué no dejamos a esa persona o esas relaciones que no nos hacen felices? ¿Por
qué nos aferramos a algo que no nos conviene? ¿Por qué no somos capaces de
romper con esas personas que nos están dañando y que sabemos a ciencia cierta
que no nos convienen y que nunca nos harán felices?
Existen ciertos sentimientos que son muy comunes y que
muchas veces nos impiden avanzar.
* Sentimiento de Culpa. A veces no nos
decidimos a dejar a una persona porque nos sentimos culpables si lo hacemos. La
verdad es que estar con una persona por pena o por obligación a la larga no
trae más que problemas. Además de no ser felices tampoco seremos capaces de
hacer feliz a esa otra persona.
Si esa persona en cuestión se conforma con una
relación tan pobre no significa que también nosotros debamos hacerlo. Siempre
que seamos fieles a unos principios humanos, siempre que seamos personas
honestas, nuestro derecho y nuestro deber es buscar la felicidad porque lo contrario es engañarnos a nosotros
mismos y a los demás.
*Sentimientos de baja autoestima. Muchas veces estamos unidos
a una persona que no nos conviene porque tenemos una autoestima muy baja y
pensamos que no nos merecemos nada
mejor. La verdad es que no se trata de encontrar a personas mejores o peores
sino de que cada uno de nosotros somos únicos y si no buscamos nuestra
felicidad, entonces nos estamos condenando a una vida muy pobre. Aprender a querernos y a aceptarnos tal y como somos es fundamental para poder ser independientes emocionalmente.
*Sentimientos de miedo a lo desconocido. El miedo a lo
desconocido también nos lleva a la inmovilidad. Muchas veces el miedo lo
tendríamos que tener a lo conocido que ya sabemos que nos hace infelices. Es
humano tener miedo a lo desconocido, pero cuando lo conocido es perjudicial,
entonces hay que tener valor para luchar por nuestra felicidad.
*Miedo a estar solo. Hay que desmitificar la soledad como algo negativo, al contrario la soledad es un estado muy positivo y deseable a experimentar de forma periódica. Somos seres sociales y como tales debemos y necesitamos tener
relaciones con otras personas, pero también es muy necesario para poder crecer
personalmente el tener nuestro tiempos de soledad. En soledad podemos llevar a cabo
procesos de autoconocimiento muy beneficiosos.
Todos los grandes pensadores han recomendado la soledad como
algo básico a experimentar de vez en cuando. Como método para conocernos,
pensar en nosotros, mimarnos, aprender a querernos y aceptarnos y reflexionar sobre nuestras metas.
Por otra parte, la felicidad es muy relativa y no debemos
basarla únicamente en una pareja. Es verdad que para muchas personas tener
pareja es algo muy importante, pero lo bonito del ser humano es que no somos
todos iguales y que hay muchas personas que son muy felices sin tener una
relación de pareja. Aunque si es verdad que debemos relacionarnos con los demás
y no renunciar a comunicarnos, a tener amistades, a salir…
Disfruta de ti mismo, mímate, aprende a disfrutar de la vida desde una situación de independencia emocional. Relaciónate con otras personas desde tu autencitidad. Quiérete a ti mismo y busca relaciones que te enriquezcan, no te aferres a personas que no merecen tu atención.
Hasta el próximo post. Felices días de encuentro con vosotros mism@s y de disfrutar y aprovechar vuestros espacios de soledad.
Mer
Muñoz
Artículos relacionados
GRACIAS
ResponderEliminarMe ha venido perfecta esta entrada un día como hoy. No lo he pasado muy bien últimamente y ahora veo la soledad de otra manera, sólo hay que darle un pequeño giro de tuerca y se consigue ver con otros ojos :)
Muchas gracias por compartir tus pensamientos. Me alegra que la entrada te guste y te ayude. Te animo a seguir acompañándonos en nuestro "Viaje Interior"
ResponderEliminar